sábado, 31 de diciembre de 2011



Queremos volver a hacer hincapié en lo importante de la noticia para que tomen ustedes ciudadanos y autoridades gubernamentales de lo que ha plasmado en un informe la NASA y la ESA. Esos dos organismos aseguran que puede haber una gran la tormenta solar más grande de los últimos 50 años y que estaría por estallar el 2012 o 2013 como mucho.

Además, queda dicho informe contrastado por el equipo dirigido por Mausumi Dikpati, del Centro Nacional de Investigaciones Atmosféricas (NCAR por sus siglas en inglés), “el siguiente ciclo solar será de un 30 a un 50% más intenso que el anterior”.

Los astronomos destacan que en sus observaciones se ve con una frecuencia cada vez mayor manchas solares que anuncian el comienzo del próximo ciclo solar, que se estima tendrá su máximo entre 2012 y 2013.

Se denomina eyección de masa coronal a una onda hecha de radiación y viento solar que se desprende del Sol en el periodo llamado Actividad Máxima Solar, que ocurre cada 11 años. Esta onda es muy peligrosa ya que, si llega a la Tierra y su campo magnético está orientado al sur, puede dañar los circuitos eléctricos, los transformadores y los sistemas de comunicación, además de reducir el campo magnético de la Tierra por un período. Cuando esto ocurre, se dice que hay una tormenta solar. Sin embargo, si está orientado al norte, rebotará inofensivamente en la magnetosfera.

Las eyecciones de masa coronaria lanzan ingentes cantidades de materia y radiación electromagnética hacia el espacio más allá de la superficie solar. En algunos casos estas eyecciones se quedan en la corona (llamándose entonces prominencias solares) o pueden adentrarse en el sistema Solar o incluso más allá, en el espacio interestelar. El material eyectado es un plasma consistente principalmente de electrones y protones, pero puede contener pequeñas cantidades de partículas más pesadas como helio, oxígeno e incluso hierro. Esto se debe a los enormes cambios y turbulencias producidos en el campo magnético de la corona solar.

Los investigadores dan por hecho que un máximo solar gran intensidad podría perjudicar muy seriamente a los satélites, las redes eléctricas, las redes de telefonía móvil, los sistemas GPS y otras tecnologías modernas. Las consecuencias en el mundo industrial y tecnológico en que vivimos podría generar un "apagón" con su efecto colateral que conduciría a una sintomatología parecida a un CAOS.

Por tanto, aún tenemos tiempo de prepararnos. Dicho hoy aquí a 31/12/2011 y para que conste de que ya lo advertimos.

Vean la actividad solar y sus eyecciones c de masa coronaria como nos llegan periódicamente a nuestro planeta Tierra.

Por suerte - de momento - la Tierra no recibe el impacto directo, como pueden ver en las imágenes. No sucede lo mismo con Mercurio que recibe los impactos directamente.

Sabiens

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